Dénia es una cálida población situada al norte de la provincia de Alicante. Destaca sin duda por varios motivos, como lo son sus playas, las vistas desde su castillo, o la belleza del parque natural del Montgó, pero si existe un motivo especial de visita para los aficionados a la gastronomía, ése no es otro que El Poblet, uno de los mejores restaurantes de alta cocina de vanguardia que podemos encontrarnos a día de hoy.
Para los seguidores de galardones y rankings, el local de Quique Dacosta posee una interminable colección de reconocimientos, como sus 2 estrellas Michelin, 3 soles en la Guía Repsol (la antigua Campsa), un 9,25 en la Gourmetour, o un meritorio 61º lugar en la lista S. Pellegrino 2009 (a un paso de consagrarse en el conocido Top50 de este exigente listado).
El Poblet luce una doble sala sobria y elegante, sin excesos en la decoración, con capacidad para unas 50 personas, complementada por su terraza, que es la ubicación elegida para las cenas de verano, cuando el espacio interior se emplea sólo en caso de inclemencias meteorológicas. Dispone también de un moderno espacio acristalado para tomar el aperitivo o el café, y han creado un estudio que permitirá a Quique trabajar cómodamente con su equipo en las recetas que recogerá la carta de próximas temporadas.
Ante el sempiterno debate sobre si la cocina puede ser considerada un arte, hay algunos cocineros que, voluntaria o involuntariamente, se empeñan en posicionarnos a favor. Quique Dacosta es un clarísimo exponente. Probablemente, uno de los más claros del panorama gastronómico actual español. Sus recetas, siempre vanguardistas, algunas más arriesgadas que otras, se nutren de una materia prima de excepción –descomunales gambas de Dénia-, se enriquecen del talento en evolución de Quique y se inspiran en su entorno natural para la búsqueda de sensaciones del comensal. Y no olvidemos, como nos insiste Quique cuando le felicitamos por el éxito de nuestra visita, ‘el mucho, mucho trabajo en un proyecto de todo un equipo’.
La carta incluye dos menús degustación, ambos para estómagos de buena capacidad. Para conocer la trayectoria de Quique, nada mejor que el menú Nuevas Tradiciones (100 euros), que repasa una docena de los éxitos del recetario de las últimas temporadas de El Poblet (el cubalibre de foie-gras con escarcha de limón, la trufa blanca del Montgó, la cigala de las Rotas…).
Para los más atrevidos, el menú Universo Local (120 euros), que luce 16 nuevas elaboraciones, entre las que encontramos el moshi de salsa verde –magníficos guisantes-, un gran tartar de solomillo de atún rojo -el tan de moda toro- y algas frescas, y un sabrosísimo arroz con morillas e hígado de pichón a la brasa, de intenso aroma gracias al jugo de trufas.
Además de los menús, existe la opción de comer a la carta, algo menos exigente para el bolsillo (entre 70 y 80 euros).
Servicio profesional, agradable y numeroso, vajilla y cristalería de alto nivel, y extensa selección de vinos repartida en dos volúmenes (tintos + resto). Si se desea, se puede solicitar un maridaje a copas en combinación con los platos de los menús.
En definitiva, la de Dacosta es ya una de las grandes cocinas de autor de nuestro país, valiente, de personalidad claramente definida y todo un derroche de creatividad. Eso sí, abstenerse detractores de la cocina de vanguardia.
Colaboración especial: Dani – CaviarBCN
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