La última adición al segmento hotelero de lujo en Nueva York ha sido The Surrey, un hotel que ha pasado por una profunda transformación antes de abrir sus puertas el pasado mes de Noviembre. Si bien previamente se trataba de un hotel de lo más normal, siempre ha contado con una ubicación privilegiada, en pleno Upper East Side neoyorquino, a dos pasos de Central Park, de los museos y de la zona de tiendas de Madison Avenue y la Quinta Avenida.
El hotel, de un tamaño intermedio y estructurado en 16 plantas, cuenta con habitaciones para todos los gustos, desde las estándar (“salon”) a las suites, con distintas dimensiones y servicios según sea una u otra la opción de alojamiento elegida. En general, destaca la comodidad de su cama – la Dux Bed de Duxiana – con ropa de cama de idéntica marca, sin duda uno de los principales alicientes de la estancia. Adicionalmente cuentan con un cuarto de baño en el que no falta detalle en cuanto a sets de higiene y belleza se trata, así como mobiliario y equipos de imagen y sonido modernos y funcionales.
En cuanto a los servicios ofrecidos destaca la zona de restauración con el Cafe Boulud como protagonista, un restaurante de cocina francesa galardonado con 1 Estrella Michelín y al frente del cual se encuentra el afamado chef Daniel Boulud. El Bar Pleiades completa la oferta a modo de lounge-bar, con distintas posibilidades de bebida y comida a lo largo de todo el día.
Adicionalmente, dentro de las opciones de belleza y bienestar, un moderno spa se lleva la palma, con tratamientos para todos los gustos e incluso ofreciendo un menú propio a los clientes del mismo y que tengan unas preferencias alimenticias más saludables. Un correcto gimnasio, accesible las 24 horas, completa la oferta deportiva de The Surrey.
Por último, en precios, las tarifas comienzan en los $ 600-700 (400-475 Euros) para las habitaciones más básicas, lo que habla bien a las claras del tipo de clientela a la que se orienta The Surrey. Dicho lo cual, siempre se pueden encontrar tarifas promocionales o, por qué no, darse un capricho alguna vez en la vida.
Colaboración especial: Rincones Secretos
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