Bruno Chaussignand, un creador francés de gafas, se ha atrevido a hacer una apuesta arriesgada por el diseño, el arte y el lujo en cuestión de gafas. No se trata de simples gafas, con cristales y una montura para sujetarlos. Este creador tiene una filosofía muy peculiar: hacer de las gafas un objeto exclusivo para cada persona que las lleva.
Esta vez se ha atrevido con una nueva colección de alta gama, con el nombre de Timeout. En el programa: ocho modelos diferentes, en metal o en acetato. Estas gafas Collins, Duke, Mary, Coco, Vesper, Gibson o Codder están fabricadas con materiales robustos, pero naturales y no laqueados para evitar el riesgo de alergia.
Las formas son algo extrañas, pero también las hay más clásicas, anticonformistas, o más sobrias. Estas gafas se presentan como una alternativa a las grandes marcas, y cada montura está fabricada a mano, pulimentada durante tres días para garantizar un acabado perfecto.
Con Bruno Chaussignand, las gafas se convierten en un accesorio de moda, como si fuera un reloj, o una joya. Esta marca de referencia está presente en Europa, Estados Unidos, Canadá, y en más de 50 ópticas de todo el mundo.
Más información: Gafas Bruno Chaussignand