Si bien las gafas son una de las tendencias más populares en la fusión del oro y los accesorios, es, cuando menos, algo excéntrico procurarse unas gafas de vista a base de quilates de este material precioso. Pero el asunto tiene buenos precedentes: Bentley Gold Eyewear, las Porsche P’8499 o los modelos de D&G son algunos ejemplos. Ahora la casa CliC Gold ha querido sumarse a esta tendencia lanzando unas más que costosas gafas para leer, diseñadas por el co-inventor Hugh Power.

Las gafas presentan además, más de una particularidad. Aparte de sus 18 consistentes quilates de oro, cierran con un sistema de conexión magnética en el frontal, conservando compacta la parte trasera. Sin duda, un trabajo de alta tecnología en el que cada pieza ha precisado 50 horas de trabajo, que resuelve unos laterales expandibles para adaptarse perfectamente. Su diseño está concebido para repartir perfectamente el peso por todos sus puntos de «anclaje» a la cabeza.

Las piezas, fabricadas en Estados Unidos, conllevan un período de entrega de entre 6 y 8 semanas desde que se realiza su pedido. Una colección en edición limitada a 300 ejemplares numerados, que vienen con garantía de por vida. No sólo un diamante es para siempre.

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