Esta es la segunda vez que Jean Paul Gaultier viste de lujo y fiesta una botella de champán Piper-Heidsieck. El creador de moda francés encierra las burbujas del champán en un estuche fabricado con cristales y látex, para darle un look mucho más sexy y chispeante a la vez, a una marca de referencia.

En 1999, Jean Paul Gaultier diseñó un corsé rojo para una botella de champán Piper-Heidsieck. Entonces dijo: «Me he imaginado que podía sublimar un excelente champán como si fuera el cuerpo de una mujer«. Ahora, doce años más tarde, el modisto mantiene su misma línea ofreciendo un Black Cancan para la botella.

La idea es la de revestir la botella Millésime 2000 de Piper-Heidsieck. Para ello ha creado un vestido de alta costura. Se trata de una auténtica oda a la seducción, y el diseño le ha sido inspirado por el París de los años del cancán. En realidad se trata de una reedición, puesto que la botella original de Gaultier salió a la venta en el año 2000, justamente para celebrar el cambio de siglo. En la versión de este año, el champán se presenta en un maletín de regalo que además viene con dos copas de cristal. Este estuche Black Cancan Millésime 2000 se vende por 490 euros.

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