Esta pequeña maravilla de Hublot, marca de relojes oficial de la Fórmula 1, lleva los colores del Japón, el blanco y el rojo, y ha sido realizada con materiales de alta tecnología, inspirados directamente en la Fórmula 1. Por tanto, podemos descubrir que luce una caja de cerámica, con acabado satinado perlado, con un gran número de agujeritos que recuerdan a un disco de frenos.

Pero, esto no es todo, puesto que el brazalete está fabricado en caucho y en Nomex, que no es más que la fibra sintética, puesta a punto por Dupont De Nemours, y que forma parte de la composición del equipo con el que se visten los pilotos de la Fórmula 1.

Este reloj tiene una edición limitada de 250 ejemplares. Debemos saber que el primer ejemplar, el que recibió el número 0/250 se vendió en subasta, y el conjunto de los beneficios se entregó al KEF.

Kid’s Earth Fund es una organización que trabaja en todo el mundo para promover la paz y la conservación del entorno, a través del arte creado por los niños. Todos los beneficios se destinan a proyectos en favor de la infancia del mundo entero que sufre a causa de la guerra, de la pobreza y de la contaminación medioambiental. La venta permitió a la organización invertir algo más en la región de Tohoku, para ayudar a los niños que fueron afectados por el tsunami del pasado marzo y por el seísmo que afectó a tantas poblaciones del Japón.

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