El origen del Rolls-Royce Phantom Coupé 2009 parte de aquel concepto que Rolls-Royce presentó hace un tiempo (2006); el 101EX. ¿Se acuerdan? Bien, hoy aquel concepto es ya una poderosa realidad.
El Phantom Coupé está equipado con un motor (fabricado por BMW) V12 de 6,75 litros que produce 460CV. Dispone de un desposito de combustible con un 25% más de capacidad (100 litros) que la versión sedán, lo que asegura una mayor autonomía en viaje.
En cuanto a comportamiento, los ingenieros de Rolls-Royce han orientado este Phantom a ser el más dinámico de la serie. Algo por otra parte lógico tratándose de un coupé. Su chasis es de aluminio y está construido como manda la tradición: a mano. Se necesitan soldar más de 130 metros de aluminio para cada vehículo.
A pesar de sus dos puertas no se ha descuidado el espacio trasero. Este mantiene el nivel de calidad y confort habitual de la marca. El interior es exactamente lo que se espera de un Rolls-Royce; refinamiento y ese clasicismo inherente de la marca. Como curiosidad les diremos que el techo interior del vehículo dispone de un sistema de iluminación con fibra óptica mediante el cual se logra transmitir la sensación de estar bajo un cielo estrellado. Imaginen esa iluminación junto al sistema de audio compuesto por 15 altavoces y 420W de potencia y tendrán un espectáculo grandioso.
La producción de este elitista vehículo comenzará a mediados de este 2008 en la planta que Rolls-Royce Motor Cars tiene en Goodwood.
El Rolls-Royce Phantom Coupé 2009 será presentado en la 78 edición del Motor-Show de Ginebra (6-16 marzo) y tendrá un precio que se situará entre lo que cuesta un Phantom (485.000 euros) y un Phantom Drophead Coupé (415.000 euros).