La carne de buey de Kobe es, quizás, la más internacional de entre las carnes. Considerada por algunos la mejor carne del mundo, es desde luego la más respetada, buscada y apreciada entre entendidos y sibaritas. Sin embargo, la ternera de Ozaki, menos nombrada, menos accesible (y por tanto algo más especial) es, según los que las que tienen ocasión de probarla, no menos suculenta e incluso, aseguran, más sabrosa.
El secreto reside en la riqueza biológica de sus tierras costeras, pero sobre todo en el cuidado que reciben sus animales (bueyes y terneras) que no sólo son sacrificados de forma tradicional para preservar las propiedades de la carne al máximo; también reciben un tratamiento más que especial, que incluye masajes al más puro estilo spa, un suculento manjar diario a base de grano y hasta alguna «copichuela» (a algunas les dan a beber cerveza).
Otro de sus fuertes reside en su elaboración, que consiste en repartir bien la carne y la grasa. De este modo, la pieza resulta tierna y jugosa y se deshace en boca al masticarla. Todo un placer gourmet por su rareza y elevado precio, que puede rondar los 50 euros la pieza en los mejores restaurantes tradicionales de Japón.
Más información: comprar ternera de Ozaki (web en japonés)
Vídeo: Ozaki beef